Las lentejas son muy recomendables para las personas anémicas, así como para aumentar la secreción de la leche en la lactancia. Por su alto poder nutritivo no deben faltar en la dieta diaria. La sopa preparada con unas pocas lentejas es de cualidades laxantes por ser un estimulante para el tubo digestivo. Son muy recomendables para los niños, y para quienes sufren de reumatismo, gota y artritis. Las personas con afecciones hépaticas deben comerlas con moderación.
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